El valijero y empresario comenzó a ser juzgado por la compra de un campo en Mendoza y en Comodoro Py sorprendió su cambio físico.
Delgado, de pelo largo y con el cuerpo poco trabajado. Esa fue la imagen que quedó en la memoria de la gente de las últimas apariciones públicas de Leonardo Fariña , antes de ser detenido, alojado en el penal de Ezeiza e ingresar al programa de protección de testigos.
En su reaparición pública, el valijero y empresario sorprendió con su cambio físico. Con el cuerpo más trabajado, unos kilos de más y rapado, el look del arrepentido de la causa por la » ruta del dinero K » llamó la atención.
Al prestar declaración indagatoria en el juicio oral al que es sometido por un Tribunal en lo Penal Económico por presuntas irregularidades en la compra y venta de un campo en Mendoza, Fariña sostuvo que durante la gestión anterior «el denominador común fue la exclusión de Lázaro Báez » de las investigaciones por operaciones ilegales. Además, acusó al ex titular de la AFIP Ricardo Echegaray de haber «encubierto» al detenido empresario kirchnerista.
El financista aceptó declarar pero anticipó que no respondería, por ahora, preguntas del tribunal y las partes, aunque deslizó que podría hacerlo una vez que avance el debate. En el juicio se buscan determinar responsabilidades en la operación de unas 3.400 hectáreas en la localidad de Tupungato, en Mendoza, que en diciembre de 2010 fue pagado cinco millones de dólares y en 2012 fue vendido en 1,8 millones.
Fariña, artífice de las operaciones, omitió brindar detalles sobre cómo y quiénes financiaron la compra y la venta del campo.
Ante el Tribunal Oral en lo Penal Económico N 1, integrado por los jueces Claudio Gutiérrez de la Cárcova, Jorge Pisarenco y Susana Pellet Lastra, el ex marido de la modelo Karina Jelinek expresó: «Todos saben la relación que yo tuve con el grupo Austral», de Báez.
Fariña se quejó por ser el único juzgado en el proceso por la compra y venta del campo.
Con información de la agencia DyN.