El proceso para elegir a un nuevo Papa es una tradición centenaria y compleja, que se lleva a cabo en el marco de un evento conocido como Cónclave.
El Vaticano llevará a cabo este proceso tras el fallecimiento del papa Francisco.
Paso a paso de un Cónclave para elegir al nuevo Papa:
1. Sede Vacante:
- La elección de un nuevo Papa solo ocurre cuando la Sede Apostólica está vacante, es decir, cuando el Papa fallece o renuncia.
- Tras el fallecimiento del Papa, el Cardenal Camarlengo certifica su muerte y se inician los preparativos para el Cónclave.
2. El Cónclave:
- El Cónclave es la reunión del Colegio Cardenalicio en la Capilla Sixtina del Vaticano, donde los cardenales electores (menores de 80 años) se reúnen para elegir al nuevo Papa.
- Los cardenales se aíslan del mundo exterior, sin comunicación con nadie, para garantizar la privacidad y la libertad de la elección.
3. Las votaciones:
- Las votaciones se realizan mediante escrutinio secreto. Cada cardenal escribe el nombre de su candidato en una papeleta y la deposita en una urna.
- Para ser elegido Papa, un candidato debe obtener una mayoría de dos tercios de los votos.
- Si ninguna votación alcanza la mayoría requerida, se realizan votaciones sucesivas, hasta un máximo de cuatro por día.
4. La fumata:
- Tras cada votación, las papeletas se queman en una estufa.
- Si no hay elección, se añade paja húmeda a la quema, produciendo una «fumata negra» que indica que no se ha elegido Papa.
- Cuando se elige un Papa, se queman las papeletas sin paja, produciendo una «fumata blanca» que anuncia al mundo la elección del nuevo Pontífice.
5. «Habemus Papam»:
- Tras la fumata blanca, el Cardenal Protodiácono anuncia desde el balcón de la Basílica de San Pedro: «Habemus Papam» (Tenemos Papa).
- El nuevo Papa se presenta ante los fieles y ofrece su primera bendición «Urbi et Orbi» (a la ciudad y al mundo).
Puntos importantes:
- El proceso se rige por la Constitución Apostólica «Universi Dominici Gregis», promulgada por Juan Pablo II en 1996.
- La elección se basa en la oración y la guía del Espíritu Santo, buscando al sucesor de San Pedro que guíe a la Iglesia Católica.
- La tradición y el secreto son elementos fundamentales del Cónclave, para garantizar la libertad de los cardenales electores.