La localidad bonaerense de General La Madrid quiere cultivar cannabis con fines medicinales. Es la primera localidad argentina que lo propone. Todos apoyan el proyecto, que los concejales aprobaron por unanimidad.
La iniciativa empezó el año pasado con los estudios de Marcelo Morante, un médico que nació en La Madrid, es profesor de la Universidad de La Plata y estudia los beneficios de la marihuana en pacientes con enfermedades como la epilepsia refractaria.
El objetivo es cultivar unas veinte plantas de cannabis en un predio ubicado en el parque industrial de la localida bonaerense. Luego de cosecharlas, investigarían su uso en un laboratorio para probarlas en pacientes con epilepsia refractaria. Para eso necesitan el permiso del Ministerio de Salud y de Seguridad de la Nación. Pero quienes llevan adelante la iniciativa pretenden que lo discuta el Congreso.
A mediados de este año, los seis concejales de La Madrid –tres del Frente para la Victoria y el resto de Cambiemos- resolvieron pedir al Congreso que modifique la legislación vigente y despenalice la siembra y el cultivo de la planta. De esa forma, estarían habilitados para realizar ensayos clínicos, es decir, para establecer evidencias de seguridad y determinar su uso adecuado. Eso los convirtió en la primera localidad del país en tener un plan para investigar el cannabis, según indicó diario Clarín.
En la localidad, ya se organizaron. En el hospital funciona el equipo de cuidados paliativos que monitorea a los pacientes que han decidido usar aceite de cannabis. Una de sus integrantes es la psicoanalista Verónica Gorgensen. «La hija de una paciente con cáncer nos dijo que el aceite le había devuelto a su mamá. Esta mujer estaba deteriorada, con limitaciones y no podía conectar con su entorno. Con el tratamiento oncológico y el acompañamiento del cannabis, ella y su familia están disfrutando el día a día», comentó.
En marzo último, el intendente de la localidad bonaerense de General Lamadrid, Martín Randazzo, se refirió a la iniciativa. «El tema es poder hacer un ensayo clínico, permitido por el Estado Nacional, y que la ciencia pueda protocolizar con la universidad, con el Conicet y demás especialistas», dijo Randazzo, médico de profesión.
«Tratamos de no mandar a los pibes a la cárcel, tratemos de hablar con ellos, y buscar verdaderamente a los que hacen negocio y generan dividendos a favor del narcotráfico», remarcó el jefe comunal.
