El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) difundió esta tarde los datos de pobreza correspondientes al primer semestre de este 2024. El número es escalofriante: el 52.9, casi 16 millones de personas, están debajo de la “línea roja”.
La estadística es la más alta de los últimos 20 años y se aceleró durante el gobierno de Javier Milei. En sólo seis meses, la pobreza subió 11.2 por ciento y la indigencia creció 6.2 por ciento. Los datos están en sintonía con los que había adelantado el observatorio de la UCA.
El informe del INDEC señala que la pobreza abarca el 42,5% de los hogares y el 52,9% de las personas; en tanto que un 13,6% de hogares -18.1% de las personas- quedaron por debajo de la línea de indigencia (LI). En números, son 4.319.760 hogares y 15.685.603 de personas pobres; y de 1.378.142 y 5.379.588 de personas indigentes.
En el caso de Bahía Blanca, los números no son menos alarmantes: el 44,4 % de la población es pobre (o sea, de cada 10 personas, más de 4 son pobres).
En cifras concretas, son 142.000 los bahienses que están por debajo de la línea de la pobreza.
En cuanto a la indigencia, el porcentaje asciende a 13,9 %, indigente, 8 % más que en el primer semestre de 2023.
Si se toman esos porcentajes por hogares, el 34,6 % del conglomerado Bahía Blanca – Cerri el 34,6 % se encuentra por debajo de la línea de pobreza, mientras que el 10,1 % no logra acceder a los requisitos mínimos de la Canasta Básica Alimenticia.