Corrado se encuentra acusada de haber realizado maniobras estafatorias tendientes a desapoderar de la herencia sucesoria perteneciente a ex cuñado, Adolfo José Luis Herro, que le correspondía al hijo y único heredero universal Maximiliano Antonio Rodríguez Labastía.
La decisión de la magistrada obedece a una presentación realizada por parte de la defensa, a la cual prestaron conformidad el resto de las partes, por lo que resta fijar una nueva fecha para la concreción del debate oral y público.
Según la causa, los hechos ocurrieron a partir del 25 de julio de 2005 fecha en la que se produjo la muerte de Adolfo Herro, allí un grupo de personas de la familia y amigos, entre los que se encontraba Corrado, llevaron a cabo diversas acciones para vaciar el acervo sucesorio lo que le impidió a Rodríguez Labastía acceder a lo que por derecho le correspondía.