El arzobispo de Santa Fe y presidente del Episcopado, monseñor José María Arancedo, manifestó su preocupación por los efectos devastadores de una «inflación creciente» y destacó la necesidad de crear empleo.
«El momento actual no es fácil, se está en un cambio de gobierno, de orientación política, con una inflación que no se ha logrado dominar», señaló el referente de la Iglesia, quien destacó algunas buenas intenciones de la nueva administración, pero advirtió que hay otras necesidades más urgentes.
«NO PODEMOS ESPERAR LO MÁGICO, LOS PODERES DEL ESTADO TIENEN QUE DAR LAS RESPUESTAS QUE ESPERA LA GENTE»
«Las personas que más sufren necesitan honestidad, transparencia y coherencia, pero también solidaridad y equidad. Espero que esto sea transitorio, que se sepa que hay un bien común», manifestó en declaraciones a la radio LT10 de Santa Fe.
De acuerdo con informes privados que se publicaron esta semana, los precios habría registrado un alza cercana al 7% en abril. Pese a ello, el Poder Ejecutivo continúa apostando a un descenso «drástico» de los índices a partir del segundo semestre.
En ese sentido, Arancedo argumentó que «no se podría estar uno o dos años en un contexto de inflación creciente. Eso tiene que encontrar una salida y eso también es cuestión de crear empleo, trabajo digno e inversiones».
Durante la misma entrevista, Arancedo remarcó las urgencias de los sectores más necesitados y pidió una reacción de las autoridades: «No podemos quedarnos esperando lo mágico, tienen que ser los poderes del Estado los que tienen que dar las respuestas que la gente está esperando»,
Finalmente el arzobispo apuntó que «los números de la pobreza a nivel nacional, en Santa Fe la emergencia hídrica, son cosas que preocupan». Y consideró que en estos «momentos difíciles» es necesario que haya una «gran capacidad creativa y solidaridad de aquellos que más tienen sobre los que menos tienen». «Hay que encontrar el rumbo político para alcanzar el bien de todos», finalizó.
Infobae