Tengo una gran confesión que hacer, y la verdad es que me mata de vergüenza. Hace algunas semanas, empecé la grabación de un podcast con una amiga en donde tratamos, de una forma muy liviana, diferentes tópicos relacionados a sexo y relaciones. Uno de los temas recientes fue el sexo anal y ambos relatamos nuestras experiencias en torno a esta oscura y misteriosa cavidad.
En fin. Aunque era lógico, nunca anticipé que Olivia, mi co anfitriona, preguntaría sobre el legendario punto G masculino, la próstata, y su función dentro del organismo. Con cuatro décadas de vida encima, me sentí como un completo imbécil por mi respuesta. Dije algo así: “Es una glándula que cuando la estimulas causa placer y, por alguna razón que ignoro, está conectada con todo el aparato reproductor y, bueno, pues te hace eyacular. Ya sabes, todo es una enorme tubería.”
Quiero reiterar que el tono del programa es todo menos médico. Por el contrario, su corte anecdótico, empírico y conversacional, pero aun así, lo que contesté dejará mucho que desear a quien lo escuche.Por eso, en esta ocasión me di la tarea de investigar con absoluta seriedad los confines de la próstata y redimir lo acontecido en mi programa. De paso, todos despejamos algunas dudas que podamos tener.
¿Qué es y para qué sirve la próstata?
Antes que nada, me dio gusto que no estaba tan perdido en mi vaga descripción. De acuerdo con Live Science, “La próstata es una glándula dentro del aparato reproductor masculino cuya función primaria es secretar líquido prostático, uno de los principales componentes del semen. Los músculos de esta glándula también sirven para propulsar el líquido seminal a través de la uretra durante la eyaculación”. Su tamaño promedio es similar al de un chabacano o albaricoque, rodea la uretra y se encuentra justo debajo de la vejiga.
La próstata y el placer sexual
El portal de la Universidad de California en Santa Bárbara explica de una forma muy didáctica que el masaje prostático puede producir increíbles sensaciones de placer en los hombres y, por lo tanto, orgasmos únicos. Por su parte, Healthline afirma que la estimulación de esta glándula trae consigo varios beneficios clínicos como “ayudar a la eyaculación, al flujo de orina y a la disfunción eréctil. Dada su ubicación biológica, la única forma de alcanzarla es a través de la penetración anal, lo cual ha generado muchos tabúes alrededor de esta práctica. Es muy importante aclarar que lo anterior no tiene nada que ver con la orientación sexual de quien la realiza. Parejas homo y heterosexuales la disfrutan por igual. Así que basta de portarse infantiles cuando su novia se los proponga.Los riesgos de la próstata
Esta glándula suele crecer durante toda la vida, al final del día, es un músculo. Al rodear a la uretra (el tubo dentro del pene por donde sale la orina y el semen del organismo), la inflamación de la próstata (ya sea por prostatitis o por hiperplasia prostática benigna) puede comprimirla y producir otros síntomas como micción frecuente, goteo o fuga de orina y un chorro intermitente o débil al orinar.
Además, está el cáncer. La Sociedad Mexicana de Urología y la Secretaría de Salud advierten que en el país mueren anualmente más de cinco mil hombres por esta enfermedad, principalmente, los mayores de 45 años. La cifra es alta porque a pesar del riesgo, solo el 4 por ciento de los hombres se realizan pruebas preventivas. Si deseas conocer más sobre este tema visita el sitio de la Sociedad americana contra el cáncer.
¿Las mujeres tienen próstata?
Recientemente escuché un debate sobre la posibilidad de que las mujeres compartieran esta glándula que siempre había sido exclusiva del sexo masculino. La respuesta es no. Al menos no es igual. Ellas tienen unas glándulas en los labios de la vagina llamadas, glándulas de Skene, sin embargo, estudios recientes han revelado que estos órganos tienen funciones parecidas a las de la próstata, por lo que han recibido el nombre coloquial de “próstata femenina”.
GQ. ES